Escribir

Cuando se escribe se hace
de las formas
que uno desea o sienta

Escribir, se hace,
desde las entrañas
entregando el corazón en cada verso
o dejando atrás las nostalgia
para recuperar cada instante
en uno de sus recuerdos

Cuando escribes
el mundo
se detiene ante tus ojos

Y entonces
las aves elevan su vuelo
intentando hallar con su batir
las puertas prohibidas del paraíso

Cuando encuentras
la palabra perfecta
cuando un verso
hace que una mariposa agite sus alas
haciendo tintinear tu existencia

Cuando sientes
tan de cerca la suerte
Cuando reinventas
la vida y la muerte

Cuando dios
ya no se te aparece
cuando el destino
entre los dedos se te desvanece

¡Cuando escribes!

La soledad te atrapa
La impaciencia
deja de ser un problema
La añoranza se vuelve tu compañera

Y la esperanza te aguarda
sentada
en el último peldaño de la escalera

Escribir es vivir,
escribir es, como morir
sin querer hacerlo

Y al hacerlo, morir digo,
hacerlo únicamente
para poder seguir viviendo

Uno muere solamente una vez
y la vida es una quimera
repleta de soluciones a problemas

Escribir es amar
amar al viento, a la verdad,
a la tragedia, a la amnistía, a la paz
a la locura: ¡loca vieja loca!

Uno nace una sola vez
y la vida
es una tormenta de tormentos
donde los mejores momentos
nos convierten en personas humildes
y los peores extraen de nosotros mismos
nuestros verdaderos instintos

Entonces es cuando de veras
uno se demuestra a sí mismo
cuánto vale la valentía de los cobardes
después de que los valientes
ofreciesen su ayuda demasiado tarde

Uno vive solamente una vez
y escribir
es como nacer, vivir y morir en el intento
y hacerlo en ese preciso momento

Escribir al amor
es como amar por primera vez:
¡Una estupidez!
pero: ¡una maravillosa estupidez!

Cuando escribes
dios deja de existir
y no existe mejor elixir
que escribir para poder sobrevivir

Cuando escribes
los solsticios
se transforman en eternidades:

¡Que importan entonces
los rascacielos y sus calles!

Escribir es nacer
Escribir es vivir
Escribir es morir
Escribir es…estar aquí

El mundo, el destino,
El paraíso y los mil infiernos
el infinito, el ocaso transcendental
la filosofía de la verdad

La suerte y su indecente correspondencia
Las mentiras que no son serias
Las flores marchitas
y las caricias que no te dejan a medias

Cuando escribes
las tragedias se vuelven reales
e incluso parecen en algún verso
mostrarte su deferencia

Sin embargo los vientos del oeste
siguen estando ahí,
azotando tu rostro con indolencia
y sin mostrar un ápice de condescendencia

Pero escribes,
te levantas y lo haces
limpias tus lágrimas
con la tinta derramada de tus mejores versos
y escribes

Escribes al odio, al desamor
a la nostalgia, al recuerdo,
al desengaño, al poder, al amor
al alma, al corazón
a la mujer que te destrozó,
al pequeño que te emocionó

Escribes mientras amas
Escribes mientras sueñas
Escribes mientras desnudas tu alma
Escribes mientras muere tu esperanza

Te levantas y escribes,
lo que sientes, lo que vives
lo que puedes, lo que tienes

Escribes, escribes, escribes…
susurras, lloras, sonríes, amas…
y mientras tanto
sigues, callas, maldices

Pero siempre, sea como sea
siempre ... concluyes el día
sentado ante tu propia silueta
esperando muy poco de la vida

Y tomando entre tus dedos
la pluma que te acaricia el alma
mientras ese algo que tan solo tú sientes
te obliga a seguir así,
simplemente escribiendo
aquí, allí, en el principio
y hasta el fin
con el único objetivo de seguir así
para poder escrbir