y yo aquí,
sin bandera que ondear
y sin mastil
al que quererme agarrar
al que quererme agarrar
Las tierras Santas
cada vez con más fieles
Y yo aquí,
sin fe, sin credo y sin pasión
por cualesquiera que sea la religión
Los hombres engañando y robando
amasando tesoros y divisas
en forma de primas de riesgo
y bonos del estado
Y yo aquí,
observando ensimismado
cómo los ladrones modernos
se hacen con el barco
y arrojan por la borda
los enseres más preciados
Y esos, a los que ellos
llaman pobres desdichados
mientras tanto
nadando a contracorriente
de un lado hasta los confines más oscuros
del otro lado
sin rumbo, sin destino,
sin camino, sin futuro
Y mientras tanto,
yo aquí,
soñando con un mundo
que no fuese así
Fantaseando con Doremis
que no sonasen así
con melodías que despertasen
de veras, a las fieras
Y que una vez despiertas,
nadie las detuviera
Y sin embargo
¿Qué nos queda pues?
Un "Toque de queda"
o un "Estado de sitio"
pero sin bandera
Donde se nos imponga
como único mérito
obedecer una y otra vez
como siempre lo hicimos
Los sueños de Morfeo
convertidos en pesadillas
el Dios Baco
ebrio de necesidad
Zeus, sin orden,
sin destino y sin Justicia
Apolo perdido entre Oráculos
que no vaticinan nada bueno
Afrodita demacrada
Poseidón ahogado
entre olas
y las propias ruedas de su carro
Y el Olimpo parece ya
una fila de desempleados
pues hasta sus majestuosas columnas
se acercan aquellos que en un pasado
creyeron ser Dioses
y tenerlo todo orquestado
Y no,
ni los Dioses son Dioses
de por vida
Ni nosotros
podremos resistir
toda esa vida, viendo
cómo nos roban hasta la comida
El mundo creando mitos
y yo sin embargo
...
aquí
aquí
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